Respetar las culturas e ideologías son importantes para que no se repitan estos sucesos terroristas que afectan a la humanidad.
Modesto Rangel Miranda modestorangel46@gmail.com
Los hechos históricos marcan el verdadero cambio que, las personas vivieron hace 19 años del atentado a las torres gemelas en Nueva York, sin embargo, hay que comprender que esto es una guerra político-religiosa, cuyo anales de la historia, aunque no somos parte, los panameños de esa cultura, sí nos afecta por los intereses estadounidenses en la República de Panamá.
La historia de esta acción se traslada cuando el hijo de Abraham, Ismael y su madre Agar, fueron expulsados por órdenes de la esposa de Abraham, Sara. Dios protegió a Ismael y su madre ser el padre de los ismaelitas, que son los filisteos, cananeos, samaritanos, que, peleaban contra los israelitas, por la Tierra Prometida.
Luego, cuando ya el Estado de Israel y Palestina fueron declarados independiente, los Estados Unidos mostró simpatía con Israel, aunque no se alegraba de los estados islámicos y Palestina.
Fue, en la década de los 80 cuando el líder Osama Bin Laden se entrenaba con agentes de la CIA. Los cierto es que, los estadounidenses nunca pensaron que este líder islámico haría el golpe más horroroso a las torres gemelas en Nueva York el 11 de septiembre del 2001 y luego, lo que pudiese haber sido un atentado al Pentágono.
La cronología nos enseña que estas culturas tienen ideales contrarios, sus pensamientos, su ideología y costumbres son distintas a nuestro diario vivir; acá en América, especialmente, en Panamá donde cualquier situación puede tener un diálogo.
Esta fecha debe recordarse como un ejemplo de que, se debe respetar cualquier cultura, aunque sus creencias y costumbres son sagradas para los musulmanes e islámicos.