Opinión

Ciento sesenta y cuatro años del incidente de la tajada de sandía

Conservar cada detalle de nuestra historia es un compromiso que todas las generaciones tiene; porque, cada hecho es parte de la identidad panameña.


Modesto Rangel Miranda
modestorangel46@gmail.com

La patria es el verdadero sendero donde sus hijos han dado el mayor sacrificio de ser una nación libre y soberana, sin embargo, pareciera que estos 164 años, los panameños olvidan rápido todos los momentos difíciles en nuestros antepasados dieron al momento de lograr nuestra independencia, no solamente, de los estadounidenses sino también de los colombianos.

Es meritorio recordar que fue un extranjero, estadounidense, quien por su avaricia de no pagar, 5 centavos, por un pedazo de sandía causó la indignación de José Manuel Luna, cuando se le ordenadaba el pago por la sandía; la actitud represiva de un extranjero y sus compañeros provocaron que un pueblo indignado de las injusticia de Colombia y las acciones abusivas del gobierno estadounidense determinó que se dieran estos hechos.

Lo cuestionable era que, un año antes, en 1855; Don Justo Arosemena, había proclamado el Estado Federal del Istmo, sin embargo, esto sólo fue temporal hasta 1865, cuando Panamá pasó nuevamente a ser estado dependiente de Colombia.

Es triste ver como por años y décadas fuimos el punto de dominio de los estadounidenses quienes mantuvieron esos anhelos intervencionistas. Hoy al cumplirse 164 años de ese histórico acontecimiento damos la vuelta a la página y vemos que la lucha de un pueblo fue valiosa; por su parte, es degradante ver cómo los panameños han olvidado el significado de nuestra historia, de las diversas gestas nacionalistas.

Es hora que las autoridades, del MEDUCA y los profesores de historia sean más conscientes de la realidad que vivimos, ser panameño es valorar nuestras fechas de luchas generacionales, lo que demuestra ser un verdadero patriota.

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