La falta de atención afecta principalmente a las promociones sexta, séptima y octava, sumando un total de 343 unidades, que protestan en todo el país.
Iván Saldaña contacto@frecuenciainformativa.com
Desde hace más de un año, policías jubilados que forman parte de la reserva de la Policía Nacional han estado esperando el pago de su jubilación. La espera se ha prolongado debido a la falta de trámites oportunos por la institución policial, lo que ha dejado a estos exagentes en una difícil situación económica.
A pesar de estar en reserva, continúan recibiendo descuentos como si estuvieran en servicio activo, lo que agrava su situación financiera.
Marixena Samudio, capitana en proceso de jubilación, expresó su decepción por la falta de prioridad que la institución muestra hacia quienes han dedicado 30 años de servicio al país. Mientras, se asignan recursos para otras necesidades del Ministerio de Seguridad, como el mantenimiento de áreas verdes y gastos de la aeronaval, los jubilados policiales se sienten ignorados.
«Somos 343 unidades en esta situación. Se nos está descontando impuesto sobre la renta, seguro educativo y seguro social, lo que nos obliga a reclamar posteriormente para recuperar esos fondos», lamentó Samudio; quien aseguró que tendrán que utilizar las mismas estrategias de protesta para poder recuperar lo que se les ha descontado injustamente.
Los esfuerzos de los reservistas por obtener respuestas han sido en vano. Las recientes protestas en Chiriquí no han sido atendidas ni por la Defensoría del Pueblo ni por las autoridades regionales, aseguraron los manifestantes.
Colón Reyes, capitán en retiro, afirmó que continuarán luchando hasta obtener una respuesta satisfactoria.
La falta de atención afecta principalmente a las promociones sexta, séptima y octava, sumando un total de 343 unidades, que protestan en todo el país. Además, se espera que alrededor de mil más se jubilen a mediados de año, lo que empeoraría la situación.
Los reservistas de la Policía Nacional han llevado a cabo protestas durante más de un año sin obtener resultados. Esta semana, han pasado tres días sin ser escuchados por ninguna autoridad.
En un último esfuerzo, han enviado una carta a la Comisión de Presupuesto de la Asamblea Nacional, solicitando una cortesía de sala para presentar su situación y asegurar la asignación de recursos para el pago de sus jubilaciones.
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