Con rosas negras y vestido de negro, Rodrigo Rodríguez, representante de El Tejar de Alanje, en la sesión del Concejo, pidió reabrir el puesto de salud en su corregimiento.
Iván Saldaña contacto@frecuenciainformativa.com
El distrito de Alanje conmemoró este 13 de septiembre, los 430 años de fundación, con la participación de autoridades provinciales y diversos actos, entre ellos, la sesión del Concejo Municipal, donde la nota a destacar fue la presentación del representante del corregimiento de El Tejar, Rodrigo Rodríguez, con un ramo de rosas negras y vestido de negro.
El motivo de esta particularidad, según el concejal, es el abandono de las autoridades de salud en este distrito, en especial su corregimiento, donde han muerto, desde el 2020, siete infantes en el área indígena, en el río Chirigagua, quienes llegan a labores de zafra junto a sus familias y carecen de atención y medicamentos.
Rodríguez pidió que se abran las instalaciones del puesto de salud que fue cerrado en el 2020, porque, se necesita sobre todo, ayudar a los pueblos indígenas que sufren cada día. Hay más de 100 viviendas en precarias situaciones y en todo el corregimiento son más de 3,000 moradores.
El representante reconoció que se han hecho las gestiones con la Dirección Regional del MINSS, pero hasta el momento no hay respuesta. Lo único que se ha logrado es que cada dos meses sean visitados por personal médico, pero esto no es suficiente, porque, estas personas se movilizan constantemente.
Por su parte, el representante de Canta Gallo, Freddy Lozada, presidente del Consejo, resaltó que, entre las solicitudes planteadas en la sesión fue la apertura de los centros salud, que se necesita en todos los corregimientos rurales.
«Necesitamos constante giras médicas y en los puestos de salud, una enfermera, por lo menos, para que le dé asistencia todos los pobladores», concluyó Lozada.
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